El gran filósofo es probablemente aquel que sabe profundizar en aquellas ideas y sentimientos que todos, a lo largo de nuestra experiencia de vida, hemos atisbado, aunque las exigencias del sobrevivir y el actuar no nos hayan dejado margen ni tiempo para desarrollar esa reflexión más honda. Por tanto, el filósofo se dirige al ciudadano para hablarle no de cosas extrañas o extraterrestres, sino de su propia vida, con el resultado de los muchos años dedicados a mirar un asunto desde diferentes ópticas.
El francés Paul Ricoeur (1913-2005) ha sido uno de los grandes pensadores contemporáneos sobre el ser del hombre, sobre la ética y sobre la relación de la cultura con el lenguaje y con la religión.
En este librito, se recoge la conferencia que impartió en 1985 en la Universidad de Lausana.
Ricoeur, hombre cristiano de la minoría protestante francesa, conoció bien el mal y el sufrimiento. Su padre murió en la Primera Guerra Mundial, siendo él un niño de dos años. Movilizado en 1939, pasaía toda la Segunda Guerra Mundial como prisionero de guerra de los alemanes. Cuando en los años 60 trataba de implantar un nuevo estilo educativo en la recién creada universidad de Nanterre, fue víctima de las movilizaciones estudiantiles de extrema izquierda, que le hicieron objeto de burla hasta el punto de llamarle “payaso”.
Las universidades norteamericanas no pensaban lo mismo. Ricoeur enseñó durante 15 años en la prestigiosa Universidad de Chicago, tomando un oxñigeno que se resultó vital. El contacto con las corrientes anglosajonas de filosofía analítica y de ciencias sociales le permitió volver por la puerta grande y, desde finales de los 80, transformarse en una de las figuras indiscutibles de la escena intelectual francesa. En “El Mal”, Ricoeur reflexiona sobre el más rocos problema teológico cristiano. Si Dios es infinitamente bueno y, como infinitamente poderoso, determina el curso de la historia, ¿qué sentido tiene el sufrimiento de los justos? ¿Cómo el siglo XX, que había experimentado la barbarie a escala masiva en dos guerras mundiales y otros episodios macabros, podía reconciliar esas matanzas con Dios?
Paul Ricoeur
El mal
Ed. Amorrortu
http://www.amorrortueditores.com/

Fuente:
http://elgallodigital.com/