Nos hallamos ante un libro ambicioso y de largo recorrido que propone una articulación magníficamente documentada de la obra temprana de Heidegger. Tomando como hilo conductor la genealogía de la pregunta por el sentido del ser, la presente obra articula el núcleo temático y metodológico del pensamiento del joven Heidegger a partir de un completo estudio de sus escritos de juventud y de una discusión abierta con la literatura secundaria más reciente.
El libro se estructura en cuatro partes:
En primer lugar, se dibujan los rasgos generales del contexto histórico, social e intelectual en el que se enmarca el pensamiento del joven Heidegger y se traza brevemente su itinerario filosófico con el fin de obtener una panorámica de los problemas y de los temas que se abordan en su obra temprana.
En segundo lugar, se muestra como el problema del ser empieza a aflorar en los primeros escritos de los años 1912-1916. En la discusión con el neokantismo y la primacía otorgada al sujeto de conocimiento como fundamento de todo conocimiento, encontramos a un Heidegger que se interroga por el trasfondo extralógico que posibilita todo juicio lógico. Ahí encontramos la raíz oculta de la cuestión del ser entendido como horizonte último e irrebasable de sentido.
En tercer lugar, se desgrana el núcleo temático de su programa filosófico de juventud en torno a una articulación del fenómeno de la vida humana. En este sentido las investigaciones filosóficas de Heidegger analizan primero la experiencia fáctica de la vida en autores como Pablo, Agustín, Eckhart, Lutero y Schleiermacher y, poco más tarde, se traducen en un creciente interés por la filosofía práctica de Aristóteles. La interpretación en clave ontológica de los escritos de todos estos autores lleva a Heidegger descubrir toda una serie de modos de existencia primariamente prácticos de la vida que él asimila y transforma productivamente en su hermenéutica de la vida fáctica. Finalmente, se exponen las razones filosóficas que llevan al joven Heidegger a desplazar, durante la segunda mitad de los años veinte, sus previas interpretaciones de la fenomenología de Husserl y de la filosofía práctica de Aristóteles al estudio de Kant, precisamente en un intento de analizar la relación entre yo pienso y tiempo en el marco de sus análisis de la temporalidad originaria del Dasein.
En cuarto lugar, se exponen los problemas metodológicos a los que tiene que hacer frente Heidegger desde sus primeras lecciones de Friburgo de 1919 para acceder a la esfera primaria de la vida fáctica, una tarea que desemboca en un profundo cuestionamiento de la fenomenología reflexiva de Husserl y en una simultánea reformulación de la fenomenología en términos hermenéuticos. Tras una aclaración preliminar del significado de una filosofía entendida primero como ciencia originaria de la vida y luego como hermenéutica de la facticidad, se desglosan sistemáticamente las etapas de desarrollo de la fenomenología hermenéutica de Heidegger en contraposición a los postulados metodológicos de la fenomenología reflexiva de Husserl.
Finalmente, la página web de la editorial Herder (http://www.herdereditorial.com/) pone a disposición de los lectores interesados un exhaustivo apéndice de más 110 páginas, en las que autor ofrece una relación completa y cronológicamente ordenada de las actividades académicas, los escritos, las conferencias y las lecciones realizadas por el joven Heidegger entre los años 1912 y 1928. También suministra una actualización de las traducciones castellanas existentes y una extensa literatura crítica con indicaciones bibliográficas acerca de su biografía, correspondencia (además, se resalta la correspondencia todavía en preparación y la todavía existente en archivos académicos y personales), con referencias a obras introductorias, instrumentos lexicográficos, monografías y artículos de investigación acerca de su obra temprana. En definitiva, se trata de un loable trabajo de documentación que, sin duda, complementa el libro y resultará de gran interés a los estudiosos de este período de la vida de Heidegger.
En conjunto, el libro destaca no sólo por el amplio aparato crítico y por una exposición clara y sistemática del pensamiento del joven Heidegger, sino también por el esfuerzo de transmitir las ideas principales del autor alemán en un lenguaje claro y sencillo, lejos de los heideggerianismos al uso. Sin duda, el libro trasluce el rigor que Jesús Adrián ha demostrado en traducciones anteriores de textos heideggerianos tan conocidos como el Informe Natorp y El concepto de tiempo.
JESÚS ADRIÁN ESCUDERO,
Heidegger y la genealogía de la pregunta por el ser.
Una articulación temática y metodológica de su obra temprana.
Barcelona,
Editorial Herder,
2010,
621 pp.
Fuente: www.uned.es/dpto_fim/…/13_ADRIAN_ESCUDERO.pdf
SPAIN. 31 de marzo de 2011