Giambattista Vico o Giovanbattista Vico, Filósofo de la historia y protosociólogo italiano, abogado napolitano, notable por su concepto de verdad como resultado del hacer (verum ipsum factum).
23 de junio de 1668-23 de enero de 1744.
A pesar de todo su origen humilde (era hijo de un librero) estudió la carrera de derecho y fue profesor de retórica durante más de cuarenta años. Había aspirado a una cátedra de jurisprudencia, más prestigiosa, pero se debió limitar a la docencia de retórica, que suponía estipendios más reducidos y que Vico complementó durante años ofreciendo lecciones privadas.
Contribuyó de manera notable a su formación el rol de preceptor cerca del marqués Rocca, en el castillo de Vatolla in Cilento, papel que desarrolló desde 1689 a 1695 y que le dio acceso a la imponente biblioteca de su huésped en la que se encontraban obras de San Agustín, Ficino, Pico della Mirandola, incluyendo a Botero y Jean Bodin, teóricos del derecho natural, y Tácito.
De su actividad como docente provienen las Seis Oraciones inaugurales, escritas para la apertura de los años académicos que corrieron desde 1699 a 1707. En su Autobiogafía, publicada en 1725, Vico cita como fuente inspiradora de su Scienza nuova, la metafísica emanada de las ideas platónicas, el realismo del historiador Tácito, el método inductivo de Francis Bacon, el jurista Hugo Grocio en lo atinente a las relaciones entre filosofía y filología.
Su propósito manifiesto es poner en relación el mundo ideal con el real, poniendo en línea la filosofía -que se ocupa de la verdad- con la filogía -que se ocupa de la certeza como método histórico y documental-, en lo que concierne a la investigación de la génesis ideal del mundo civil.
Se propuso formular los principios del método histórico, basándolos en tres premisas:
Determinados periodos históricos tienen características semejantes entre sí, aunque varíen los detalles.
Establece un orden en los ciclos históricos: Fuerza bruta/fuerza heroica/justicia/originalidad deslumbrante/reflexión destructiva/opulencia,abandono y despilfarro.
La historia no se repite, no son ciclos cerrados, más bien una espiral creciente que crea nuevos elementos.
Sus tesis sobre la distinta evolución de los periodos históricos influyó más adelante en las obras de Montesquieu, Auguste Comte y Karl Marx.
Principios de la Filosofía de la Historia
Principi d’una scienza nuova intorno alla natura delle nazioni (1744) (conocida en castellano como Principios de ciencia nueva o “Principios de ciencia nueva. En torno a la naturaleza común de las naciones, en esta tercera edición corregida, aclarada y notablemente por el mismo autor” (nota: la tercera edición es considerada la versión final)
El principio del verum-factum
El punto de partida de la filosofía de Vico es la cuestión de la verdad, que para Descartes era ofrecida al hombre dentro del ámbito de aquellas ideas claras y distintas que le resultaban “evidentes”.
Vico se ha de oponer con firmeza a esta concepción racionalista que, a su manera de ver, se desentiende de la creatividad, que constituye la facultad más propiamente humana. Así, según su célebre afirmación, “Verum et factum reciprocantur seu convertuntur”: esto es, lo verdadero y el hecho se convierten el uno en el otro y coinciden.
Es éste el principio de la filosofía de Vico, el que establece el nexo entre la verdad y la producción, según el cual la única verdad que puede ser conocida radica en los resultados de la acción creadora, de la producción.
Por esto, además, solamente Dios conoce la totalidad del mundo, en cuanto lo crea continuamente; al hombre sólo le esta reservado el puesto más humilde de demiurgo de la historia y artífice de su propio destino, siendo la historia y su vida los únicos objetos posibles de su conocimiento en tanto son productos suyos. Del mismo modo, el otro campo en que puede alcanzar la verdad, es el de la matemática, de la cual, en cierto sentido, también es productor.
Fuente: http://www.universia.es/portada/actualidad/noticia_actualidad.jsp?noticia=96836