Aniversario de un filme visionario. Las claves de la película que llevó a las masas la filosofía y las nuevas tecnologías.
La estrella del rock de la filosofía actual, el Elvis de los filósofos, Slavoj Zizek, explicaba en su artículo The Matrix, o las dos Caras de la Perversión que él prefería una inmersión inocente en esa película, lejos de “interpretaciones intelectualoides y pseudo sofisticadas”.
Y, sin embargo, a renglón seguido, citaba a Lacan, a Platón y a la Escuela de Frankfurt.
Hoy hace una década que se estrenó The Matrix, la película que llevó la filosofía y las reflexiones cyberpunk al gran público, pero que también tiñó de números verdes las pantallas de millones de ordenadores, batió récords de ventas de DVD, recaudó más de 460 millones de dólares y puso de moda las gafas de mosca y las levitas de cuero negro. El filme con el que parecía que el futuro del siglo XXI había llegado un año antes del Efecto 2000.
Zisek dice en ese artículo que el filme es como la mancha de un test de Rorschach, que cada uno ve ahí lo que quiere. Pero estos son algunos de los referentes técnicos y filosóficos que barajó y que anticipó.
1- Novedades técnicas
La bala puede ser mucho más lenta que el ojo. Uno de los recursos más copiados en video clips, publicidad y en otros productos fue la técnica bullettime photography: la imagen ralentizada y asistida por un ordenador que registra 12.000 fotogramas por segundo. Hasta entonces, parecía sobrehumano que Pat Morita alcanzara una mosca con dos palillos en Karate Kid. Nada ha vuelto a ser igual desde que Neo (Keanu Reeves) esquivó balas. Las escenas de acción tendieron puentes con el cine de artes marciales de Hong Kong, lo que algunos interpretaron como un paso más a la globalización e intercambio cultural en el mundo del cine.
2 – Mitología griega
Los dioses y héroes clásicos se notan en nombres como Perséfone o Morfeo, entre otros. Abundan conceptos cristianos como El Elegido, la Trinidad o Sión, pero también budistas.
3 – Referentes visibles
Las referencias a textos clásicos son muy evidentes. Sin embargo, los hermanos Wachowsky no dejaron clara una influencia como Los Invisibles, el tebeo de Grant Morrison. La parafernalia cyberpunk, la reivindicación de la libertad del individuo y esos personajes salvadores con gafas tintadas. También se oyen de forma diáfana ecos de auto- res de ciencia ficción como Philip K. Dick o Isaac Asimov.
4 – Reflexión filosófica
En el filme se reflexiona sobre la posibilidad de elegir el propio destino. Además de la duda de Descartes, el referente filosófico evidente es la caverna de Platón, sólo que se plantea justo al revés. En el mito original, el mundo ficticio, nuestra cárcel, es el físico, y se accede al real mediante el ejercicio del alma. En Matrix, el mundo reales el físico, al que se llega huyen- do de la ilusión de realidad tendida por las máquinas y los programas informáticos.
5 – Agujero de Alicia
Un referente con una cita explícita en el guión es la Alicia de Lewis Carrol. Las pastillas rojas y azules y las setas, el sueño y la realidad, forman parte de la misma tradición de literatura psicodélica.
6 – Más plataformas
Algunos críticos comentaron la poca coherencia o falta de claridad de la segunda y tercera parte de la saga. Los fans habían seguido el desarrollo de personajes en otros soportes como los dibujos o los videojuegos. El anticipo del lenguaje del cine más allá de la gran pantalla.
http://www.adn.es/cultura/20090331/NWS-0233-Decada.html
by gore wachowsky
Algo mas…
Fuente: http://www.neoteo.com/the-matrix-cumple-10-anos-15344.neo
Sí, esta es la clase de noticias que hacemos nosotros. A veces Pac-Man cumple 30 años y otras veces Matrix cumple 10 años. ¿Por qué es tan importante este aniversario? Más que nada porque es una gran película, que no solo se convirtió en objeto de culto que influenció el cine que vendría, sino porque también masificó la alegoría de la caverna y fue un éxito de taquilla hablando de lo mismo que Platón.
Una de las mejores cosas de este filme es que es mucho más que una gran película de acción. A simple vista puede parecer solo eso. Los efectos especiales son impresionantes aún hoy y probablemente tiene algunas de las escenas de acción más recordadas de todos los tiempos. Quien diga que no saltó como nene de tres años cuando Neo esquivaba las balas y la cámara giraba alrededor de él, es un mentiroso sin corazón.
Pero, como dijimos, Matrix siempre fue mucho más que una brillante película de acción. Llegó en pleno 1999, a un paso del fin del milenio, con toda la histeria del error 2K. La tecnología comenzaba a mostrar su potencial digital, Internet estaba muy bien acomodada y crecía a pasos agigantados. Fue un momento en la historia en el que la tecnología se había apoderado de nuestras vidas sin que nosotros nos diéramos cuenta. The Matrix tomó todos esos conceptos que ya considerábamos como de la vida cotidiana y le dio una nueva vuelta a la idea de la clásica guerra entre el hombre y la máquina.
Siempre que pensamos en este concepto nos salta a la mente Terminator. Pero en Matrix no hay robots futuristas que intentan dominar el mundo, sino que la guerra ya pasó… y perdimos. No hay manera de evitarla, la única solución es levantarse desde las cenizas y pelear con todos los pronósticos en contra. Porque no es la humanidad contra las máquinas, sino solo un puñado de personas que lograron escapar del mundo que las máquinas pusieron frente a sus ojos.
“Esquiva esto…”Algo que siempre tendrá la primera película sobre sus secuelas es lo sutil que es. Si quieres puedes tomarla como una simple película de acción, pero a la vez está repleta de ideas y conceptos que tal vez no desarrolla a fondo, pero sí plantea. No solo trata los temas más claros, como el hombre y su relación con la máquina, el amor sobre todas las cosas o que nada es imposible, sino también el viaje del héroe, desde ser completamente indiferente a una causa a convertirse en el salvador de la misma. También replantea, de cierta manera, la Alegoría de la Caverna de Platón. La humanidad es prisionera de su conformidad y las apariencias, mientras que el mundo de las ideas es solo para un puñado de elegidos iluminados, cuyo destino es guiar al resto hacia la luz.
Y como si todo este contenido no fuese suficiente, la película también era un show visual que ha dejado una marca en la sociedad. No solo por cómo se vestían los personajes, como el clásico traje de FBI para los agentes, con auricular incluido, sino también el filtro verde que hacía que dentro todo se viera verdoso. Lo mismo va para lo impactante que era ver a los seres humanos conectados a las máquinas mientras eran cosechados. Pero no todo era tan abstracto, los efectos especiales marcaron un antes y un después en la utilización de la tecnología en el cine. Y ahí es donde comienza la ruptura entre la original y sus secuelas.
¿Y tu… qué eliges?
Aunque algunos no queramos aceptarlo, Matrix: Reloaded y Revolutions existen. No es que las odiemos con toda nuestra alma, pero son dos errores muy grandes. Más que nada porque ambas fueron dos simples películas de acción, cuyo subtexto está muy cifrado en el argumento y es ilegible y aburrido de interpretar. Es cierto, Reloaded tiene algunos conceptos interesantes, pero están presentados de una manera muy tosca y sin la sutileza que demostró tener la primera. Pero esto es completamente entendible, Matrix es una película muy particular, que salió exactamente cuando tenía que salir. Quién sabe, tal vez ni los hermanos Wachowski sabían lo que tenían hasta que lo sacaron al público. Pero aún así, por todo esto y más, es que queremos recordar a The Matrix, como lo que es: mucho más que una simple película de acción.