Burbujas refrescantes en la filosofía

Estudiantes de ESO y de Bachillerato y universitarios, profesores con ganas de despertar el entusiasmo de los alumnos, amigos de la filosofía, lectores curiosos y gente divertida estamos de enhorabuena:
por fin aparece en las librerías un libro capaz de alegrar todo el escaparate, de contagiar su espíritu burlón y su alma inquieta. De refrescarnos la vida con sus chispeantes burbujas. Porque Una pequeña historia de la filosofía, de Ramón Irigoyen, publicado por ediciones Oniro, levanta el ánimo del más pintado y seduce con su tono iconoclasta y sus muchos conocimientos. Sorprendente, poco convencional y urdida con una erudición a prueba de bomba, la disfrutarán con auténtico regocijo.

Prepárense, pues, y acudan a esta fiesta del pensamiento, convocada para arrastrarnos al placer de recordar o descubrir la plana mayor de la historia de la filosofía, desde los presocráticos al siglo XX. Ningún nombre significativo falta a esta deliciosa cita en la que los filósofos bajan de su pedestal, nos permiten tocarlos y desde luego comprenderlos. Platón cede el asiento a Aristóteles porque Irigoyen, desmitificador donde los haya, afila el bisturí y nos dice que las meninges se le ablandaron con los delirios de los Misterios de Eleusis (el Lourdes de entonces). Pero pasen, acérquense sin miedo y vean a Sócrates escuchando con toda probabilidad en el Hades los discos de Barón Rojo; contemplen el jardínde Epicuro como una tertulia, nada reprimida, que abre su puerta a las mujeres; descubran a San Agustín, el enamorado de Dios, segregando endorfinas en su visón celestial; a Descartes mientras sucumbe al frío de Suecia por el afán de conocimiento de la Reina Cristina; o disfruten de esa joya desternillante por la que descubrimos que la filosofía de Heidegeer hay que leerla desde el éxito del Aserejè: cantando…. Aporta también novedades importantes: por primera vez Demócrito está situado donde cronológicamente le corresponde: por manipulación de la historiografía, y para que brille en solitario Platón, se le destierra al grupo de las presocráticos para hacerlo menos visible. Agradecemos a Ramón Irigoyen que desacralice tantos tópicos y oscuridades sin renunciar al rigor de los contenidos y a una excelente presentación de los contextos que enmarcan los periodos históricos. Que saque brillo a una materia a menudo deslustrada en algunos manuales de uso. Un auténtico plan renove de materiales escolares para alumnos y profesores. Todo ello aderezado con unas estupendas ilustraciones de Patrice Blanquart que dan carácter al libro y nos acompañan en su recorrido sin distraernos del texto

Pero hay un par de contribuciones impagables: las esclarecedoras calas etimológicas (nuestros jóvenes agradecerán esta aproximación al origen de las palabras), que nos regala la formidable formación clásica y el saber humanista de Irigoyen. Y, frente a la exclusión de las mujeres de la historia de la filosofía, la incorporación, ya inexcusable, de esas tres extraordinarias mujeres que admiramos: Simone de Beauvoir, María Zambrano y Hanna Arent. Nada más oportuno para descubrir el verbo poético de Zambrano o la prodigiosa visión de la realidad del siglo XX –que es la de ahora mismo- en Arent y Beauvoir.

La trayectoria literaria de Ramón Irigoyen se enriquece con esta nueva aportación al mundo de la divulgación cultural. Reconocido por sus anteriores publicaciones, es autor de 13 libros, entre ellos los de poesía como Cielos e inviernos y Los abanicos del caudillo, que refrescaron el panorama poético de los 70; de originales y muy traviesos relatos: Inmaculada Cienfuegos y otros relatos, Un placer inconfesable; dos libros de historia: La locura de los Césares yLas anécdotas de Grecia;además de artículos y ensayos recogidos en Locas por el Ejército y Los clásicos en la empresa. Del currrículo de Cervantes al acoso moral del Cid: un libro que describe el mundo laboral desde el currículo a la jubilación basándose en textos literarios de la historia de la literatura de Grecia al siglo XX y en textos de los autores más relevantes del mundo del marketingObras todas ellasingeniosas, satíricas y bienhumoradas que nos han alegrado muchas tardes con su lectura amena. Espléndidas e inolvidables son también sus traducciones (Cavafis, “Medea”, de Eurípides, O. Elitis…). Por todo ello ha merecido el Premio al Valor Ético por el conjunto de su obra que se le otorgó en Salamina (Grecia).

Celebremos, pues, este saludable libro de Ramón Irigoyen, esta regocijante fiesta del pensamiento abierta sobre todo a ese público joven y a sus profesores, a quienes seducirá sin duda esta versión tan atractiva como práctica de la historia de la filosofía.

Ficha de la obra:

Una pequeña historia de la filosofía
Ramón Irigoyen
217 páginas
15 euros
Ediciones Oniro, 2008
Ilustraciones de Patrice Blanquart
Fuente: http://www.diariocritico.com/ocio/2009/Marzo/literatura/criticas/136009/critica-filosofia-irigoyen.html

Madrid, Spain. Viernes, 13 de marzo de 2009

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *