Para Ricardo San Esteban
El tema no es de ahora. Hace dos mil años Trasímaco y Calicles discutían sobre cuál podría ser el régimen político justo. Ambos coincidían en una cosa: sería aquel que reconozca y preserve la originaria desigualdad entre los hombres. La discrepancia partía de que para Trasímaco tal preservación de la desigualdad podría darse bajo cualquier forma gubernamental, mientras que para Calicles esto sólo sería posible a través de la tiranía.
DIXIT Centre de Documentació de Serveis Socials
Como es sabido, intervino Platón, que dijo que la justicia es igualdad, y que para conseguirlo debería practicar la virtud decir llevar una vida virtuosa. Por lo tanto, el objetivo del hombre político no se circunscribía a su ambición de poder o “pleonexia”. Trascendía su ansia de poder llena de violencia y de injusticia, para-como predicaba Sócrates-alcanzar la perfección de los ciudadanos en su justa medida o proporción.
El poder era-Platón dixit-un bien, ya que representaba el orden que tendía a hacer real lo que se consideraba justo Esto es así? Nunca se puede analizar el poder en abstracto y está claro que es ejercido siempre por un grupo de la sociedad, y muy difícilmente tienda al bien común sino que, más vale, responde al bien del grupo que lo detiene. Puede que en un principio aparezca, si, como algo por encima de los intereses sectoriales pero una vez afirmado se verá que lejos de ser así. El poderoso o los poderosos de turno actúan, de alguna manera, enfrentados al resto de la sociedad y para conservar ese poder, objetivamente han de ejercer una coerción encubierta o abierta y-sobre todo hoy en día-uno de los principales sustentos será el discurso legitimador.
El ciudadano de hoy se encuentra un poco perplejo, después de haber leído un reportaje a Helmut Dubiel, sobre la mentira como forma de hacer política. Es decepcionante, pere no dice nada nuevo.
La lucha por el poder es, a partir del comportamiento de las micropartículas en física y siguiendo con la conducta humana, una lucha por la posesión de energía y masa.
Esta lucha, esta batalla, tiene el mismo basamento que planteaba el general Chino Sun Tzu hace milenios: “Toda guerra se basa en la impostura”, vale decir, se triunfa si se engaña al enemigo.
Aparentemente, esto vale para la política. La energía, en la sociedad humana, parecería Corporizar en el dinero. La “pasta” como dicen los españoles, permite acceder al poder. Quien no la tenga no obtendrá poder ni administrar justicia.
Mas, en este último aspecto, paradójicamente se puede decir que esta administración de justicia sólo es justa cuando litigantes dos pobres.
El soborno y el cohecho-coima, coimisión, arreglo, cometa, en idioma vernáculo-no es nuevo. El primer intento fue aquel de Eva, cuando con fines inconfesables le ofreció a Adán la manzana. Desde entonces, treinta dinero, platos de lentejas y otras minucias fueron los vehículos para la transa de estos principiantes. Serían ampliamente superados y es un misterio insondable hasta donde se podrá llegar, con una “tangente” planetaria que ahora se cuantifica por paquetes que en algunos casos son superiores al presupuesto de muchos países. No otra cosa son, en el momento actual, los salvatajes a los bancos y especuladores, premiando así a los responsables del agravio. Tanto como sea necesario para conseguir o mantener el poder. En la última reunión del G-20 se condenó, de palabra, claro, los paraísos fiscales ¿Dónde creen que fueron gran parte de los salvatajes? Acertar, aquí. Y no serán destruidos porque son parte estructural del sistema, que necesita de estas válvulas de escape para esconder la ropa sucia.
Si a este poder se accede por estos medios, no creemos que lleve aparejado el bien platónico. En cambio, quizás se agudice el desorden en una sociedad que ya no sabe muy bien donde.
Sin embargo,-para tranquilidad de los sobresaltados-de acuerdo a la segunda ley de la termodinámica, todo desorden tiende hacia un nuevo orden.
Fuente: http://www.pysnnoticias.com/2011/06/11/bien-comun-y-el-poder/
11 de junio de 2011
Este artículo es de mi autoría y no es “para ricardo san esteban” sino que pertenece a Ricardo San Esteban y el autor no es Pueblo y Sociedad Noticias. Fue publicado hace más de un año en articuloZ. Me reservo el derecho de iniciar acciones legales por plagio si es que no se aclara la situación.