«Ingresar en el Guinness de los récords». Este es el sueño de José Luis Iborte, un aragonés de 83 años, que «atesora» 17 títulos universitarios, 14 licenciaturas y tres doctorados.
«Realizar ese sueño supondría un hito para mí y al mismo tiempo sería una forma de hacer justicia a una vida de esfuerzo y tenacidad», afirma Iborte, que acaricia con la punta de los dedos. De hecho, es el candidato mejor situado en el ámbito universitario. Su nombre ha registrado cerca de 2.000 entradas en internet, una cada 0,23 segundos.
José Luis Iborte nació en Barbastro (Huesca), en el corazón del Somontano, aunque se considera zaragozano de adopción. Hombre al que le gustan los desafíos, comenzó su andadura universitaria cuando apenas había cumplido 17 años y se matriculó en Filosofía y Letras y Derecho al mismo tiempo, y así, de dos en dos carreras, completó su currículo. «Mi vocación eran las letras y así se lo dije a mi padre que era notario y mucho más listo que yo». Él, que ejercía como abogado, me advirtió: «Si estudias Filosofía tendrás que hacer voto de castidad», porque era una carrera sin salida y, «para ganarme la vida. hubiera necesitado dar clases sin límite y eso me hubiera impedido formar una familia». Por tanto, «le propuse hacer Derecho al mismo tiempo y así tener una profesión con futuro».
Profesor y secretario
Una vez graduado, este aragonés excepcional comenzó a ejercer como abogado y siguió estudiando Geografía e Historia, Historia del Arte, Filología Románica, Clásica (griego y latín) , Inglesa, Francesa e Italiana, Económicas y Empresariales, Medicina y Humanidades, que terminó en 2008. Y además, los doctorados en Filosofía y Letras, Económicas y Empresariales y Derecho. «Si Dios me da salud -declaraba a ABC hace un año- empezaré lenguas semíticas». Y así ha sido porque ahora y haciendo gala de una tenacidad propia de su alma aragonesa, ha comenzado la licenciatura en Semíticas, especialidad de árabe, griego bíblico y hebreo. donde se forjó su decisión de estudiar Medicina. Confiesa que su gran pasión es «profundizar en el conocimiento» y cultiva «el saber por el saber». Los libros han sido y son sus grandes amigos -su biblioteca consta de más de 12.000 volúmenes- y en ellos se refugia con fuerza para calmar el dolor derivado de la pérdida de su esposa y de su único hijo, un duro zarpazo que afronta con una sorprendente serenidad. «Por ellos, en su homenaje haga todo», comenta.
Su fecunda senectud se inspira en Cicerón del que toma esta máxima: «Los ancianos conservan la memoria y la inteligencia, si no han dejado de aplicarla y de interesarse por ella».
José Luis Iborte tiene en el arte, y más en concreto en la pintura, otro de sus refugios. Su capacidad creativa le roba horas al sueño, máxime ahora que prepara exposiciones en Zaragoza, Madrid y Bilbao. La última edición de Arco también ha sido testigo de su producción pictórica.
Fuente: http://www.abc.es/20090331/nacional-sociedad/guinness-anos-carreras-cambia-20090331.html
Madrid, Spain. Martes 31, marzo 2009